¡Qué ganas tenía de escribir sobre este tema! Hay una serie de películas que no puedo dejar de ver en Navidad, independientemente de que sean de temática navideña o no, y tenía que compartirlo con el mundo. Sin más dilación, comienzo con las cinco primeras de mi top ten empezando por la número uno indiscutible:
1. "Se armó el belén" (José Luis Sáenz de Heredia. 1970)
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Paco Martínez Soria imbatible |
Por más películas que veo en estas fechas no hay ninguna que consiga arrebatarle el podio a esta joya del gran aragonés. Es impensable para mí decorar mi casa sin que de fondo esté esta historia navideña cañí. El argumento no tiene mucha complicación: un cura "old school", digamos, preconciliar, hace unos esfuerzos denodados para llevar a la iglesia a los yeyés y comunistas que componen la barriada donde predica. Tras unos intentos infructuosos, la solución para aumentar la parroquia resulta ser hacer un belén viviente que salga por la tele con la participación vecinal.
Al gran Paco le acompañan en esta película coral Germán Cobos, la maravillosa Julia Caba Alba, Ángel de Andrés, el fantástico Manuel Alexandre o Jesús Guzmán por poner unos ejemplos. Entre todos crean una historia divertida llena de obstáculos para el pobre cura, y sí, rancia e impensable hoy en día por la incorrección política pero que te hace reír con un humor sencillo y para todos los públicos.
¿Quién iba a pensar que en una peli navideña de Paco Martínez Soria se iba a hablar de la prima de riesgo, como hace el personaje de la prestamista del barrio?
2. "La gran familia" (Fernando Palacios. 1962)
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Con ese marido no me extraña |
Que sí, que sí, que si esta película es un exponente de la ideología franquista con respecto a las familias, que si se acaban las reservas de insulina al verla, que si los valores del movimiento... Me la suda, así de claro lo digo. Lo que disfruto viendo las peripecias a lo largo de un año de esta gigantesca familia no me lo quitará nadie. Por cierto, ese es el resumen del argumento. No hay apenas contratiempos en la armoniosa relación entre padres, abuelo e innumerables hijos. Bueno, innumerables no, son 15, más el que viene de camino al final de la historia. Ala, sí, toma spoiler. Sólo hay un hijo ligeramente rebelde, pero poco, interpretado por Jaime Blanch.
Aquí lo que importa es el reparto: el optimista padre encarnado por Alberto Closas, la abnegada madre interpretada por Amparo Soler Leal, el sufrido abuelo que es el simpar Pepe Isbert (por cierto, su hija María representa a una de las asistentas que ayuda a la madre con toda la tropa y que dura cinco minutos en esa casa de locos como todas), el padrino pastelero José Luis López Vázquez, más responsable de los críos a veces que los propios padres. Y entre hijos y secundarios de lujo, no puedo dejar de nombrar al gran pileño Paco Valladares, María José Alonso, un jovencísimo Pedro Mari Sánchez, el portero del inmueble interpretado por Erasmo Pascual, el cartero Luis Barbero y la fugaz aparición de Lali Soldevilla.
En fin, que esta peli va unida indefectiblemente a la anterior y suelo verlas seguidas de un tirón. Sin anestesia.
3. "Rocky Horror Picture Show" (Jim Sharman. 1975)
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El Dr. Frank-N-Furter, mi médico favorito |
¿Qué pasa? ¿Qué acaso no es de Navidad esta película? Pues esta obra maestra salida de la mente del genio Richard O'Brien la vi por primera vez en Nochebuena y es una tradición familiar visionarla todos los años ese día.
Esta película fue primero un musical teatral. El loquísimo argumento trata de una pareja que se pierde una noche lluviosa y acaba en una mansión donde se está celebrando una fiesta en honor de la criatura creada por el Dr. Frank-N-Furter, "mad doctor" (por así describirlo). Durante el transcurso de la velada la historia se complica hasta alcanzar el desenfreno colectivo con un final tan inesperado como impactante.
La estética drag a la par que kitsch de los personajes y la propia casa no tiene desperdicio. Tim Curry (¡grande!) lo borda interpretando al científico-diva, al igual que Richard O'Brien (el sufrido mayordomo Riff Raff), Meat Loaf, Patricia Quinn (divina Magenta) y una jovencísima, que no inocente, Susan Sarandon. La banda sonora es la protagonista absoluta, con el gran hit "Time wrap" que ya fue nombrado como canción imprescindible en Halloween.
La peculiaridad de esta película es que el público participa activamente cuando se proyecta en las salas (pero, vamos, que también lo puedes hacer en tu casa). No sólo te puedes disfrazar de tu personaje favorito si no que, si quieres, puedes ponerte delante de la pantalla a representar los diálogos, cantar, bailar e incluso usar ciertos utensilios para hacer los mismos efectos que escuchas en determinadas escenas: guantes de goma, carracas, arroz (hay una boda) o matasuegras. Una gozada y un festival para todos los espectadores. ¡Pruébenlo!
4. "Elf" (David Berenbaum. 2003)
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Adorable Will Ferrer |
Esta peli hace poco que la vi y ha sido todo un descubrimiento. El argumento se las trae y sólo un gamberro como Will Ferrer podía interpretar semejante papel: un bebé se cuela en el saco de Papá Noel. Se cría como un elfo pero debido a su tamaño no puede hacer lo mismo que el resto. Cuando a Buddy (el humano en cuestión), ya adulto, le cuentan que es adoptado, se lanza a la búsqueda de su familia biológica pero, si poco encaja en la sociedad élfica, menos aún en Nueva York.
A Ferrer le acompañan James Caan, Zooey Deschanel y Peter Dinklage. Esta película sólo es recomendable para fans de Will Ferrer porque te puede poner bastante de los nervios con sus gansadas e histrionismos. Como yo soy fan, disfruto doblemente con su actuación y el ambiente navideño de la historia. A destacar el eructo (real) con duración de doce segundos del presunto elfo tras beber de un trago una botella de Coca cola de dos litros. Sí, no he superado el humor de caca, culo, pedo, pis, pero veo que el resto de la humanidad tampoco: esta simpleza de peli ha recaudado más de 220 millones de dólares.
5. "Mi gran noche" (Álex de la Iglesia. 2015)
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Nunca se lo agradeceré lo suficiente
a Álex de la Iglesia |
Espero no traumatizar a nadie si digo que Álex de la Iglesia hizo esta película única y exclusivamente para mí. En serio, aún no me puedo creer que uno de mis directores favoritos realizara una película perfecta dedicada a uno de los acontecimientos que me ha apasionado desde pequeña: los especiales de fin de año de la tele. Los de Televisión Española no los ha superado nadie, especialmente los de los 70 y 80, y el espíritu de estos programas son plasmados perfectamente en la historia. Una grabación donde no pueden suceder más desgracias y anécdotas, con un trasfondo laboral reivindicativo.
Están todos bordados: Mario Casas en su papel de Adanne, cantante para adolescentes que interpreta una impagable versión del "Torero" de Chayanne, transformada para la ocasión en "Bombero", Blanca Suárez, Pepón Nieto, Carlos Areces, Carmen Machi, Carolina Bang, Hugo Silva, Santiago Segura... y a destacar especialmente el papel de Terele Pávez y Raphael como malo malísimo shakespiriano de la historia.
Yo no sé si los milenials que estaban en la sala el día que fui a ver la película se enteraron de algo o captaron los mil guiños y matices de la trama. Sólo sé que me reía sola, aplaudí como una posesa al final (yo sola, nadie me secundó) y he comprado varios ejemplares en dvd, primero uno para mi disfrute y el resto para fans de Álex o de Raphael, como es el caso de mi madre.
No dejéis de verla.
Continuará...