La verdad es que la segunda parte de esta saga de vídeos "difíciles de ver" debería llamarse "Clips infames de grandes canciones". Porque lo que tienen en común estos nuevos ejemplos de oprobios visuales es que fueron y son el reclamo televisivo de canciones maravillosas. Para qué añadir nada más. Mis ojos ya han sufrido bastante. Juzguen ustedes mismos...
- Coheed and Cambria "The suffering":
Ni aunque me lo expliquen. Este vídeo no tiene ni pies ni cabeza. Un centauro, unas sirenas, una cueva de cartón piedra, unos efectos especiales de derribo, una lucha de escorpiones digna de "Jasón y los argonautas" y un croma que es una afrenta al buen gusto y al buen hacer. Y me guardo detalles. Eso sí, al final triunfa el amor. ¿No me creen? Compruébenlo:
- The Drums "Let´s go surfing":
¿Quién no ha hecho el famoso silbidito de esta canción? Un single pop perfecto... arruinado por una baratija de vídeo. Prácticamente los tres minutos cinco segundos que dura esta alegre tonada se los pasan los poco entrenados miembros del grupo corriendo por la playa en una bonita noche. La escena resulta hilarante, qué falta de coordinación sicomotriz, éstos no han corrido ni para coger el metro. El que se lleva la palma es el cantante, ese clon indolente de Guti:
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| Jonathan Pierce, el soso-clon |
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| José María Gutierrez "Guti", el auténtico |
A lo que vamos:
- Prefab Sprout "Cars and girls":
Otra cosa no, pero Paddy Mcaloon es una fábrica de crear clásicos pop extraordinarios. Esta canción es un claro ejemplo. Pero entre que la cámara no le quiere, el vídeo es un mareo, que la animación de los muñequitos es una caquita fría... el visionado de este clip se hace un poco duro. Con que aguanten hasta la primera vez (de las muchas) que hay un primer plano implacable de los dientes del cantante ya han cumplido:
- Depeche Mode "Get the balance right":
Científicos, magos, feriantes... ¿de verdad era una buena idea colocarle un bombín a Martin L. Gore? Las humillaciones por las que pasan los jóvenes genios de Depeche Mode en este vídeo son innumerables. Y no me vale que había poco presupuesto, o a lo mejor sí, dado que se gastaron sus buenas perras en jugar a los marcianitos y en los coches de coche, que es la base del argumento de este engendro. Qué tiempos aquellos...
- Tears for fears "Head over heels":
Lo único bueno que puedo decir de este vídeo es que creo que es de los pocos que tienen como escenario una biblioteca, lugar donde me encanta estar y visitar. Por lo demás es una pena que una canción tan extraordinaria tenga una puesta en escena tan tontorrona:
- Japan "Gentlemen take polaroids":
Por favor, todo el mundo de pie que voy a hablar del grupo de David Sylvian. La verdad es que este vídeo me valdría para una tesis de lo que en los 80, especialmente en los primeros años de la década, se consideraba moderno, estiloso o sofisticado. Lo más generoso que se me ocurre decir es que éramos unos mamarrachos. No es este el momento para extenderme, pero el clip es un perfecto ejemplo. Grupo con una música impecable con una imagen... Por Dios, ¿pero por qué se empeñaban los tíos más feos de cada casa en maquillarse como una puerta en pos de la modernidad? Al único que le quedaba medianamente bien era a Sylvian (bueno y a Peter Murphy, pero este es de otro grupo). ¡Qué afán en potenciar los defectos! En fin, vídeo de escasos recursos en la puesta en escena, disfruten exclusivamente de la música y del glamour del cantante:
- The Smiths: "This charming man":
¡¡¡Ah Morrisey y su lalalalala en todas sus canciones!!! O lo amas o lo odias, no hay término medio. Y ya si lo ves en acción... Aquí tenemos una buena muestra. Impresionante single con un no menos ¿impresionante? vídeo. Tomando la definición de impresionante del diccionario, digamos que la parte de "causa una gran impresión de admiración" sería para la parte musical y lo de "causa una gran impresión de asombro" sería aplicable al dominio del amigo Morrisey en el manejo del ramo de flores. ¿No les parece que lo maneja como cierto apero de labranza? Por favor no dejen de disfrutarlo y quiéranlo como es:
- Soft Cell "Say hello, wave goodbye":
Llegamos al punto álgido. Marc Almond. Soy de Marc Almond desde "shiquitita". No sé cuantas veces habré escuchado esta canción tanto en el cassette "Non-stop erotic cabaret" como cuando sonaba fin de semana tras fin de semana en el mítico programa de radio "Plásticos y Decibelios". Si este single es inclasificable (no sé si en el buen o mal sentido), el vídeo... no tiene desperdicio. Por favor, cántenla a pleno pulmón ¡sin complejos! imbuyéndose del espíritu del Pink Flamingo, ese cabaret que es el gran protagonista de la historia, con una decoración kitsch a más no poder. En él, el amigo Almond da rienda suelta a su histrionismo, interpretando la sentida tonada con el poderío, la fuerza y el desgarro de la mejor folclórica: "Take your hand off meeeeeeeeeee, I don´t belong to you, you seeeeeeeeee, take a look at my face for the last time. I never knew you, you never knew me, say hello goodbyeeeeeeeeeeeeeee":
De verdad, prometo hacer un listado de vídeos que combinen una composición impecable con una puesta en escena magistral. Los hay.
