viernes, 26 de junio de 2020

La mujer sin impacto (medioambiental). Primera parte (Prolegómenos)



"Quien sabe contentarse, siempre está saciado" (Lao Tse)

Balance de los seis primeros meses del año:

De verdad que mi intención era buena. Y sigue siéndolo. Uno de mis propósitos este año era dar cabida al minimalismo en mi existencia en todas las facetas posibles. Sobre todo pensando en la cuestión medioambiental. Ya hice mi propio "acto de contrición minimalista" en enero. Apenas se intuía lo que se nos venía encima.

Mi propósito fue impulsado por la impresión que me causó la lectura de "No impact man" de Colin Beavan. Curiosamente, este libro llegó a mis manos de forma "reciclada": estaba en la estantería de espurgo de la biblioteca.

Beavan se propuso reducir su "huella de carbono", su impacto en el medio ambiente, a "cero pelotero".  Tiempo del experimento: un año. Empezó a relatar su experiencia en un blog, posteriormente se editó en el libro y luego se plasmó en una película de Netflix.

Estamos hablando de cambios y acciones absolutamente radicales en un matrimonio de treintañeros que viven en Nueva York, pijos con profesiones liberales (no es que le desprecie o insulte por ello, él mismo se define así) y su hija de dos años.

La verdad es que el libro me obsesionó porque veía absolutamente imposible que no dejemos ni un solo resto, ni un solo residuo, que no impactemos en nuestro entorno por mucho que nos empeñemos.

Las peripecias que les ocurren son incontables. En cuanto nos ponemos a pensar en las consecuencias de cada uno de nuestros actos, por pequeños que sean, y la influencia económica y medio ambiental que suponen, te vuelves loco. Hagas lo que hagas, vas a contaminar. Desde que te levantas hasta que te acuestas. Por muy buena voluntad que le eches. Pero siempre puedes hacer algo para ensuciar un pelín menos el mundo.

Te planteas cómo viajar sin emitir carbono. ¿Y qué como? ¿Cómo me caliento? Más aún: ¿somos conscientes de lo contaminante que es la producción de electricidad? ¿Y qué hago? ¿Me busco un generador, un acumulador? ¿Y dónde lo meto?  ¿Cuánta ropa tengo que tener? ¿Qué es menos perjudicial: un libro de papel o uno electrónico? Así con todo.

El libro parte de una base, que comparto totalmente, y es que aquí no estamos hablando de ascetismo ni de sobrevivir. No he venido yo a este mundo para ir de mártir por la vida. Se trata de no desperdiciar. La cuestión es empezar a plantearte lo más básico: ¿hasta qué punto necesito muchas de las comodidades de las que disfruto? Y la pregunta típica - tópica: ¿consumir me produce más felicidad? ¿Este nivel de consumo me tiene esclavizado a un trabajo? Demasiadas preguntas. ¿Acaso soy incapaz de ayudar al mundo?

Y aún así , con este maremágnum de dudas, uno se lanza con toda su buena voluntad a intentar aportar un granito de arena a la causa. Ojo, que cuando te embarcas en estas aventuras has de ser consciente que es una elección personal. Es decir, no te pongas en plan iluminado - gurú - poseedor de la verdad - plasta. Hay que predicar con el ejemplo porque, cuando empiezas a tomar ciertas decisiones, seguramente te vas a topar con la incomprensión, críticas e incluso cachondeo de familiares y amigos. No seas brasas. Respeta a la gente que no comparte esta iniciativa.

Bueno, pues manos a la obra:

Prescindir o reducir el consumo de artículos relacionados con ciertas aficiones era relativamente fácil.  No me hace falta seguir comprando artículos de papelería para mis proyectos de scrapbooking (por un poner) cuando tengo material que compré hace años y aún no he gastado. Lo mismo para la costura o el tejer. Pero claro, cuando me planteo, por ejemplo, el tema de la comida ya la cosa se complica. Vale, venga, el ABC del consumo responsable: comer productos de temporada y de cercanía. Perfecto. ¿Qué cercanía? Contando con que vivo en el centro de una gran ciudad, ¿qué perímetro escojo para delimitar el origen de los productos que voy a consumir con el fin de minimizar la contaminación en el transporte? ¿50 kms? ¿200 kms? Porque claro, hay que ver dónde se producen los alimentos que necesito en mi zona y siquiera si se producen. Insisto, esto no es jugar a "Supervivientes" y comer las dos cosas que se críen más cercanas. 

Ah, y los productos de temporada. Pues hay que informarse bien lo que es "de temporada" dado que ahora tenemos todo el año de todo. La verdad es que no hace tanto que solo había naranjas y mandarinas (por poner un ejemplo) en invierno. Pero ahora... Y por otro lado, si compro productos de temporada directamente al productor (ir a las huertas o granjas o a mercados donde los vendan) la cuestión te puede salir por un pico. ¿Y cómo llego a esos lugares de forma que no contamine y además pueda cargar con la compra? Por otra parte, estos artículos están más expuestos a inclemencias meteorológicas, plagas o enfermedades, lo que los encarece hasta tal punto que, en ocasiones, no puedo permitírmelos.

Y en estas reflexiones estaba sobre todos los temas relacionados con mis hábitos de consumo cuando nos confinaron. Adiós a excursiones al mundo exterior para ir a lejanos parajes en bici a adquirir mis alimentos de temporada directamente en el productor. Bueno, ni alimentos ni nada. He tenido que limitarme a lo que ofrecían las grandes superficies que me quedan al lado de casa. Y aunque alguna presuma de que sus productos son "de cercanía", "bio" y no sé cuantos engaños "ecológicos" más, el origen, el cultivo y la presentación son más que sospechosos y el precio por ser de cercanía, bio y ecológicos, inasumible. Que le tomen el pelo a otro con su "lavado de cara ecológico", conocido como Greenwashing. En el tema de envoltorios y el "mundo plástico" prefiero no meterme en este post porque merece capítulo aparte.

De sobra sé que tenía la opción "online" para comprar, pero al principio de este caos no todas las tiendas estaban preparadas para ello y las que lo estaban podían tardar lo que no está escrito en traerte el pedido. Mi otra cuita era: "vale, compro online, pero estoy exponiendo a una persona a que se contagie por traerme un pedido de algo que a lo mejor no es tan necesario". Pero precisamente mucha gente ha conservado su trabajo por realizar esos encargos.

Total, que aquí llegó ya mi disyuntiva definitiva: ¿Cómo puedo ayudar, dentro de mis humildes posibilidades, a remontar a la economía y al tiempo no traicionar mi espíritu minimalista/ecológico?

La respuesta (quizá) en el próximo capítulo.

sábado, 13 de junio de 2020

Favoritos mayo 2020





Este mes de mayo de un aciago año que ya no quiero ni nombrar ha traído gratos reencuentros musicales, buenas lecturas y frases memorables. Vamos a darle un repaso:

- Mejor película: "Becoming Jane" (Dir. Julian Jarrold 2007)


Prueba
Deliciosa pareja


Qué gran película protagonizan Anne Hathaway y James McAvoy. Esta biografía parcial de la escritora británica Jane Austen se centra en su relación/romance con Thomas Lefroy. La película se basa en acontecimientos reales que fueron recogidos en el libro homónimo de Jon Spence, asesor histórico del film.

En la película se narra no solo la relación entre ambos, sino también la lucha de Jane por imponerse a las costumbres de la época, contra los matrimonios acordados entre los padres de los contrayentes, el hecho de que una mujer deseara ser escritora y (¡oh locura!) quisiera vivir de ello... Una lucha constante contra convencionalismos que en caso de Jane Austen fue un éxito... o no... Vean la peli y juzguen por ustedes mismos.

En esta producción está cuidado hasta el último detalle de la ambientación y la trama es una auténtica novela victoriana de esas que tanto me gustan. Qué gozada. No quisiera dejar de nombrar, además de la gran interpretación de los protagonistas, la impagable aportación de James Cromwell como padre de Jane y Maggie Smith interpretando a una pérfida aristócrata clasista.


- Mejor libro: "Trilogía de Madrid 1940" Francisco Umbral (1984)


Mi cronista favorito de Madrid


Vergüenza me da no haber dedicado ya una o varias entradas a uno de mis escritores favoritos. Sí, yo he venido a hablar de los libros de Umbral. 

La faceta que más me gusta de este genio es la de narrador de sus vivencias en Madrid. No me importa leer una y otra vez sus experiencias en la pensión de Argüelles, sus aventuras con la presunta marquesa de turno, amante a su vez de algún ministro franquista, su vida en el arroyo de Abroñigal... Me entretiene, me muestra un Madrid al que tengo un poco idealizado por no vivido.

En este volumen se recogen tres libros, "Los tranvías", "Los alucinados" y " Los cuerpos gloriosos", y constituye una autobiografía, mitad imaginada, mitad real. Desde las entrevistas inventadas con literatos fallecidos, pasando por las tertulias en Chicote, todo Madrid tiene cabida en estas líneas, por las que llegan a desfilar más de 1000 personajes. Impagable la anécdota (¿real?) de cuando se presentó en una famosa cadena de radio para ser locutor con una carta de recomendación para Adolfo Suárez y este le echó con cajas destempladas ("a tenazón", es la expresión abulense usada en ese infausto momento),

Lo dicho, merece la pena. Y Umbral volverá como se merece a este blog.


- Mejor disco: "Island" Owen Pallett (2020)


Genio. Y punto


¡Ya era hora! Seis años esperando el nuevo disco del extraordinario compositor canadiense. Lo de seis años esperando es un decir, dado que este multiinstrumentista nos ofrece trabajos y colaboraciones a menudo y de lo más diversas, como la reciente banda sonora de la película "Spaceship Earth".

El caso es que después del gran disco "In conflict" de 2014, no teníamos un disco de Pallett como tal. Y lo que suele pasar cuando un artista ha ofrecido una obra maestra como el "Heartland" (2010), has de asumir que cuotas de genialidad como la de ese disco es difícil que se repitan. Aún así "Island" es un buen trabajo, merece la pena escuchar esas melodías y arreglos tan propios de Owen Pallett, perfectamente reconocibles, interpretados además por la London Contemporary Orchestra.

No les voy a engañar, este disco no es para organizar una fiesta. Disco ambiental, para escuchar con tranquilidad, con recogimiento, pero precisamente por la intimidad que destila da gusto darse un respiro y disfrutarlo a fondo.

Como siempre, es mejor un ejemplo que todas las explicaciones que se puedan dar. Por cierto, al tener que sacar el vídeo de "A bloody morning" en pleno confinamiento, a Owen Pallet le propusieron rodar a distintas personas en sus casas, como un collage de lo que estaba sucediendo en el planeta entero. Al principio no le convenció ni poco ni mucho ni nada, pero tras ver el resultado quedó más que satisfecho. 


- Mejor canción: "Blinding lights" The Weeknd

Como habitualmente, The Weeknd nos ofrece una elegante canción bailable, producción impecable y su reconocible voz, para mí de lo mejor de la "marca de la casa". 

Bailen o hagan ejercicio con esta discotequera tonada.


- Frase del mes: "La base del yo no es el pensamiento, sino el sufrimiento, que es el más básico de todos los sentimientos." ("La inmortalidad" Milan Kundera)

Y si lo dice Kundera...


- Personaje del mes: Luis Lucena


¡Qué majo era Luis!


Tarde de domingo. Sopor. Zapping. Y me topo con la película "Españoleando". ¡Ya me han alegrado la tarde! No solo la trama me tuvo ojiplática durante los 82 minutos que dura, sino que me descubrió a un cantante de lo más majo y salao: Luis Lucena.

Luis Lisart Tamarit (nombre real de este cantante valenciano) merece un post por sí solo. Este cantante de canción española llegó a hacerse popular hasta en Marruecos, hasta tal punto que el rey Mohamed V personalmente le llegó a dar un premio: una pitillera con incrustaciones en oro que el cantante guardó toda su vida.

Si había algo que le gustara a Luis eran las varietés, por ello varios de sus múltiples espectáculos llevaron ese nombre como "Su majestad el Varieté" o "Varietés 81". Ojo que en su época vendió lo suyo, grabando hasta 500 canciones, recibió tres discos de oro y, el dato que he encontrado de él que más me ha gustado, es que recibió "Casete de oro", un premio chileno, que le entregó la mismísima Rocío Jurado. Otro de los que ganaron este galardón fue Raphael. Para que nos demos cuenta que este premio no se daba a cualquiera. 

Esta estrella, hoy lamentablemente olvidada, se retiró en pleno éxito, estilo Concha Piquer. Quería que conserváramos un buen recuerdo de él. Pues venga, vamos a recordarle en pleno apogeo. ¡A españolear!


- Imagen del mes: púlpito con recomendaciones anti covid




Comulga pero seguro.


- Momento TV del mes: "Imprescindibles" Manuel Alejandro RTVE

Totalmente merecido el especial que RTVE dedicó a este grandísimo compositor gaditano.

Gocen con las palabras y las obras del Maestro a través del servicio A la Carta: https://www.rtve.es/alacarta/videos/imprescindibles/imprescindibles-manuel-alejandro/5581710/


- Experiencia del mes: Escribir el blog

Pues sí, este mes nos hemos dedicado a escribir bastante. No paran de surgir ideas de las experiencias o momentos más insospechados para plasmar por escrito. Espero "aterrizarlas" con menor o mayor fortuna en este humilde blog.

¡A por junio!

viernes, 12 de junio de 2020

"Coplas del andar torcido" The New Raemon



Pedazo de descubrimiento. ¿Disco del año? Desde luego es un clarísimo candidato. Por eso merece un post para él solito.

Ramón Rodríguez es el genio tras The New Raemon. En este trabajo le acompañan Raúl Pérez, Javi Vega, Salvador Horta, Ricky Lavado, Antonio Fernández Escobar y David Cordero al frente de los arreglos electrónicos. ¡Ah! y con la participación de Anni B Sweet en los coros. 

Ramón es un gran aficionado a la poesía, le apasiona el oficio de letrista, escribe canciones sin ponerse etiquetas. No se considera parte de ningún movimiento. En el título de este disco no debemos buscar complicadas metáforas líricas. Sencillamente esto del andar torcido es una referencia a la cojera del autor debida a un accidente de moto en su adolescencia.

Pero entremos en la enjundia de este disco, no apto para días de bajón:

Ramón Rodríguez refleja aquí el drama cotidiano de hacerse mayor, la angustia del hombre ante la incertidumbre y la deriva del mundo. En concreto, en "El árbol de la vida", según su propio autor, "se habla de vivir o sobrevivir (o ambas cosas), sin esconder la pérdida que trae consigo la vida".  Aunque muchas de las composiciones sean tristes, no quiere transmitirnos ese sentimiento, sino una idea esperanzadora. 

"A menudo los días se oscurecen 
y esconden aquello que acontece
en la feria de atracciones
ya no hay nadie que recuerde
que cada verano
es el último
cada verano
es el último verano"

("En La Feria de Atracciones")

Yo muy esperanzador no lo veo, pero si Ramón lo dice... Es más, esta es su propia explicación de la génesis de una de las canciones, y lo que pasó después:

"El verano pasado mi padre me regaló un viejo órgano que ha estado en su casa desde que yo era un niño. El órgano pesa una barbaridad, una vez instalado el teclado se me ocurrió grabar algo tocando el pedalero, de ahí surgió la intro de 'Días De Rachas Grises', mientras tocaba estaba pensando en la Nico de 'Desertshore', en el 'Funeral Chant' de Max Steiner, en el 'Agnus Dei' de Barber y también en el de Rufus Wainwrigth, la intro de la canción surgió sola de mis pies y de mi voz, incluso la letra fue improvisada. 

Dejé reposar esa idea algunas semanas hasta dar con la segunda parte de la canción que está inspirada en Lole y Manuel y Triana... ...Curiosamente el órgano que mi padre me regaló se echó a perder al día siguiente de terminar la composición de 'Días De Rachas Grises', la habitación se inundó completamente y el instrumento quedó para el arrastre, de algún modo pienso en que esta canción ha servido para que el viejo órgano se despida de mi familia, siempre pensaré en esta historia cuando la escuche."


Con respecto a la música, la influencia de The Cure no solo es obvia sino que una de las canciones, "Aunque Maldigas Entre Dientes" directamente está inspirada en la base rítmica de "The Hanging Garden", publicada en el álbum "Pornography" de la banda de Robert Smith. Y "Pronto todo será sombra" no desentonaría en absoluto en el disco "Wild Mood Swings", también de la banda inglesa.

"Pronto todo será sombra
entre el amor y el odio
la muerte vive demasiado cerca
nos hacemos daño
al hacernos fuertes" 

("Pronto todo será sombra")

A parte de esta referencia musical, el trabajo es inclasificable (afortunadamente). Hay preciosas melodías llenas de melancolía donde la voz de Ramón suena enérgica o derrotada, según el sentimiento que quiera transmitir. 

Por favor, escuchen esta maravilla de disco. Sí, tiene toda la pinta de ser un disco creado en pleno confinamiento pandémico pero, Ramón Rodríguez dice, "el mundo ya estaba mal antes".

"¿Cómo vas a detenerme?"

("Luna creciente")


Pues eso, que no se detenga y siga componiendo estas maravillas.